
Un principio muy alentado por todos los gurús de la economía mundial, es tratar de convertir los puntos débiles en puntos fuertes, las debilidades en fortalezas, los peligros en oportunidades y otros términos semejantes.
Los gobiernos, los políticos y las sociedades de la mayoría de los países desarrollados, tienen planteado un grave problema al que no encuentran solución en plena crisis: ¿Cómo reactivar la economía?.
Además, tantas veces la historia nos ha mostrado que teniendo la solución delante de los ojos, no somos capaz de verla. Como dice el refranero popular, “el bosque no nos deja ver los árboles”.
La solución está en el desarrollo de nuestro concepto PROFESIONAL 50pro. La solución al problema de la salida profesional de los mayores de 50 años, que es a la vez la solución a otros muchos problemas actuales, de una forma sinérgica y definitiva.
Veamos, los mayores de 50 años, cuya esperanza de vida actual son 35 años más, tienen unos problemas muy concretos que se pueden agrupar en dos tipos diferentes.
Sólo algunos de ellos están trabajando como autónomos. La mayoría de ellos, o bien están en situación de prejubilación/jubilación a partir de los 65 años o bien están en situación de desempleo sin una posibilidad práctica de volver a conseguir un trabajo por cuenta ajena.
Bien, hay tenemos una palabra mágica “autónomos”. Según un dicho popular “Los autónomos constituyen el sector de población más sano en cualquier país, porque nunca se ponen enfermos. No pueden permitírselo”.
Pero es que además, siempre que sus negocios vayan saliendo adelante, son los trabajadores más felices, más longevos y con más alta autoestima. Se sienten útiles y están motivados para continuar siéndolo cada día.
Tendríamos que permitir que estos mayores que tienen experiencia, contactos, incluso mayor capacidad potencial de endeudamiento que los jóvenes, se decidan a lanzarse como autónomos a crear riqueza. Además, en un mundo en el que el sector servicios es el de mayor peso en la economía, no es la fuerza física el factor determinante.
Podemos poner en marcha una enorme ola de riqueza económica, mediante la creación de negocios de mayores como autónomos independientes o creando PYMES.
¿Por qué no ofrecer a este sector de población, actualmente improductivo, la oportunidad de poner en marcha actividades económicas, solos o acompañados?
¿Por qué no ofrecerles que, estén o no jubilados, puedan actuar como autónomos, sin incompatibilidad para continuar cobrando su jubilación, si lo están haciendo en la actualidad, lo cual es un hecho en cualquier caso?
¿Por qué no motivarles eximiéndolos costes y trabas, para que se lancen a poner en marcha proyectos con los que estarían ilusionados sino supusieran un riesgo grave para su poca tranquilidad económica actual?
¿Incluyendo unas importantes exenciones de costes de creación de empresas o de nuevos puestos de trabajo e impuestos?
El balance recaudatorio del Estado no cambiaría con respecto a la situación actual, el pago de pensiones continuaría siendo el mismo, PERO el aumento de la riqueza, número de empleados, las contrataciones de personas, el incremento de compra de bienes para la producción y el consumo, aumentarían de forma exponencial!!!
Como consecuencias positivas, los jóvenes podrían encontrar empleo, e incluso oportunidades para emprender de la mano de experimentados socios que abrieran brecha.
Una vez hagamos crecer el empleo, como cualquier teoría económica tiene comprobado, el resto de las variables mejoran de forma inmediata, el consumo, la producción, las exportaciones, el PIB y todo el resto de palabras mágicas que hoy día nos preocupan.
Esta locura de proposición, es similar a la llevada a cabo en Suecia recientemente, donde se ha recortado el horario laboral de los trabajadores, MANTENIENDO EL 100% DE SU SALARIO!!!
Ha ocurrido que, los trabajadores con empleo, con más tiempo para consumir y más dinero en el bolsillo que el resto de la población, han decidido gastar más. El efecto sobre la economía ha sido inmediato y el mayor consumo ha generado mayor necesidad de producción en las empresas para satisfacerlo. Esto ha provocado un aumento en el empleo, que se ha traducido en un mayor consumo.
Para los preocupados por la inflación, que estén tranquilos, en este preciso momento ese es el menor de nuestros problemas, más bien al contrario, estamos angustiados por la amenaza de la deflación.
Solucionaremos de golpe varios problemas y entraremos en la senda de una clara recuperación económica con pleno empleo, tanto para personas entre 25 y 30 años como para los mayores de 50, y además acabaremos con muchos problemas actuales como la depresión, la angustia vital y otros, que afectan tanto a mayores como a jóvenes desempleados.
El único inconveniente serio a esta solución es la falta de espíritu emprendedor, disposición, conocimientos y/o entrenamiento de los mayores de 50 años, para acometer esta aventura. Ese es el cometido que cubrimos en PROFESIONAL 50pro. Enseñamos a “Combinar mejor la faceta personal y profesional en la segunda etapa de la vida”.