Vamos a comenzar afirmando con total optimismo, que existe una solución difícil pero real.
Comenzaremos realizando un análisis de la crisis en la situación actual, proponiendo luego una verdadera solución y destacando las que no lo son, para finalmente ver las barreras que impiden que la solución se lleve a cabo, sino se acometen con intención de derribarlas.
CRISIS
Todos nos empeñamos en hablar de una crisis que nos agobia en este momento, que es la crisis ocasional generada por el COVID. Yo comparto la seguridad de que lo único que pasará será el COVID, pero la crisis de trabajo que ha puesto de manifiesto no lo hará, al menos en el corto plazo. Sin embargo la gente ha confundido ambas cosas y así la mayoría de la sociedad ha decido esperar, diferir y procastinar cualquier cambio, a la espera de que todo se arregle solo.
Hay una segunda crisis, que casi nadie menciona que hará aún más profunda la dificultad de que una persona se dignifique trabajando y es la que está siendo creada por la robótica.
Como efecto de ambas, el empleo por cuenta ajena va a disminuir dramáticamente para toda la población en general, excepto algunos trabajos muy determinados, tanto para jóvenes como para mayores.
Si seguimos haciendo lo mismo, la previsión respecto al futuro será pesimista, porque la situación no cambiará.
SOLUCION
La solución es el cambio de actitud porque va a conseguirte un trabajo en lo que más te gusta y siendo tu propio jefe. ¿Cómo imaginas ahora tu futuro profesional?
No es tratar de conseguir un empleo ya creado, sino crear nuevos trabajos y empleos. Y eso se consigue a través del emprendimiento, que inicialmente debe ser encabezado e impulsado por los senior, basados en su mayor experiencia y resiliencia.
La solución no puede provenir de tratar de obligar a las propias empresas a que mantengan plantillas que no pueden soportar y no necesitan; sino exigir a esas mismas empresas que cuando prescindan sobre todo de senior, no se conformen con la salida fácil del outplacement – que no vale para nada a los trabajadores senior y solo pone presión en que nuevas empresas los contraten sin conseguirlo en la mayoría de las ocasiones – sino en tutelarles para que las personas se entrenen, hagan planes de negocio profesionales y pongan en marcha nuevos emprendimientos.
Las barreras que se oponen a esta solución van a ser detalladas en el próximo post